domingo, 18 de octubre de 2009

esperando mi primer telescopio

Mañana Lunes me llega mi primer telescopio comprado de segunda mano desde Madrid, pero ayer sábado ya hice mi primera salida con unos prismáticos bastante cutres que me impedían distinguir las especies claramente: obsevé e identifiqué varias garcetas blancas con su pico negro y plumaje blanco, garzas reales y cormoranes moñudos...todos ellos en el enclave mágico de las lagunas de Baldaio. Haciendo un barrido con los prismáticos me encontré en frente dos personas con un telescopio. Cual grata fué mi sorpresa cuando caminando hacia ellos y ellos hacia mi, al llegar a la misma altura me encuentro con Xabier Varela y un compañero llamado Fernando. De Xabier decir que uno de los mejores días de mi vida fué un día que nos lo encontramos en la desembocadura del Anllóns, estaba con Maria una vecina mía, gran amante de la naturaleza, y estaban ambos observando aves con un telescopio. Fué maravilloso puesto que con sus explicaciones amenas nos hicieron sentir, decir que estaba con un amigo Alberto Cebey, toda la belleza del entorno y su avifauna, observamos entre otra aves: espátulas con su maravilloso pico anaranjado, garzas magestuosas en su porte y embergadura con alas extendidas, un charrán que me maravilló con su vuelo anárquico y sus zambullidas vertiginosas, ánades y otras muchas maravillas aladas. Mientras Xabier Varela es a día de hoy (cuando lo conocí ya era) un gran ornitólogo que vive para las aves, mi vida me llevó por otros derroteros (todos menos sanos que la observación de aves), pero esé día fué el germen que fue creciendo lentamente en mi interior, un día perfecto que caló en mi memoria, y que puedo decir que hizo que hoy estea escribiendo los primeros pasos en este humilde blog. Imaginar cual fue mi sorpresa al encontrármelo de nuevo despues de tantos años. Decir que sigue siendo una maravillosa persona, alguien que te marca y al que felicité por su próxima paternidad. Cambiara el viejo telescopio que me contó partiera en dos y pegaba con pegamento por un telescopio Swarowski que le regaló su mujer, quedé impresionado con la claridad con las que se veían las aves desde una larguísima distancia. Nos mostró una ave rara que se había asentado en la boca de la laguna de baldaio, un zarapito trinador americano que comía un cangrejo al pie de unas rocas pequeñas y redondas cubiertas de musgo verde. Otro día que marcará un antes y un después en mi vida y mientras espero ansiosamente mi telescopio estoy deseando salir a los campos y lagunas a observar aves y quizás encontrarme con otros amantes de la naturaleza como en gran ornitólogo Xabier Varela. Gracias por todo y hasta pronto.

2 comentarios:

  1. Este comentario ha sido eliminado por el autor.

    ResponderEliminar
  2. Boas Raúl!!!
    O outro día xa che fixen un comentario aquí pero non se rexistrou non sei por qué.
    Diciache que grazas polos piropos...non é para tanto. Tamén lembro ese día en enseada da Insua, o pasaramos cojonudamente.
    Que teñas un feliz estreo de telescopio. Verás como se abre diante de ti unha nova dimensión.
    Estamos en contacto.
    Unsaudiño
    Xabi

    ResponderEliminar